La guerra en Ucrania tiene por el momento un efecto limitado en la economía mexicana, poco dependiente del gigante ruso, aunque el impacto colateral en los precios de las materias primas amenazan con disparar la ya muy elevada inflación.
La invasión de Rusia a Ucrania se ha vivido en México con cierta tranquilidad a diferencia de su país vecino y principal aliado comercial, Estados Unidos, y de sus socios europeos, donde México tiene también un importante mercado.
La Bolsa Mexicana de Valores (BMV) cerró la semana pasada con una ganancia del 2,14 % pese a la invasión de Ucrania, y este lunes, pese a la escalada del conflicto, cerró con otro alza del 1,61 %.
Ello contrasta con los parqués europeos, que este lunes cerraron con pérdidas en sus principales plazas tras la nueva tanda de sanciones a Rusia y la alerta nuclear declarada por Moscú.
MATERIAS PRIMAS, INFLACIÓN Y DAÑOS COLATERALES
Aunque de manera inmediata no se prevén golpes duros a la economía mexicana, expertos consultados por Efe ven una muy probable subida de los precios al consumidor -superior al 7 % actualmente- derivada del alza de las materias primas, especialmente del petróleo.
“No se descarta que alcance el nivel del 8 %, y si el precio del petróleo llega a niveles máximos históricos, se podría llegar a niveles cercanos al 10 %”, dijo a Efe la directora de análisis económico de Banco Base, Gabriela Siller, quien ve también una “alta volatilidad” en el desempeño del peso mexicano estos días.
Siller advirtió también de los peligros por el alza de los precios internacionales del petróleo -pues México es productor pero “importa más que exporta”- y de otras materias primas como el aluminio, el maíz o la madera.
“Insistiría en que el costo en términos económicos de la guerra no es tan importante, pero por supuesto que afectará la economía mexicana y va a tener efectos en la inflación”, agregó a su vez el politólogo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) Khemvirg Puente.
Puente recordó que la guerra ha ocasionado problemas por ejemplo para la panificadora mexicana Bimbo, que tal y como informó la propia compañía, paralizó por seguridad “temporalmente” sus operaciones en su planta ucraniana de Dnipro.
Siller también pronosticó que para frenar la inflación el Banco de México elevará el tipo de interés al 6 %.
Según estimó, este subiría hasta el 8 %, aumentando sustancialmente el costo de los préstamos y, previsiblemente, frenando el consumo en un momento en que el país se recupera a un menor ritmo del deseado, tras caer su producto interno bruto (PIB) un 8,2 % en 2020.
Con información de LA Times / EFE